"El LED va a ser absolutamente el Rey"

Schmid es Presidente del Centro Buenos Aires de la Asociación Argentina de Luminotecnia y nos cuenta sobre sus comienzos, el marketing en la luminotecnia, el LED, su presente y futuro, cómo así un adelanto de los productos en desarrollo.

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Gran parte del trabajo del lanzamiento de nuevos productos de las grandes compañías de iluminación viene dado por su departamento de publicidad y de marketing. Toda obra es comunicada antes de su desarrollo y después que esté terminado el trabajo de iluminación. Luis Schmid es Presidente del Centro Buenos Aires de la Asociación Argentina de Luminotecnia y nos cuenta sobre sus comienzos, el marketing en la luminotecnia, el LED, su presente y futuro, cómo así un adelanto de los productos en desarrollo.

Periodista: ¿Cómo ingresaste en el mundo de la Luminotecnia?

Schmid: Empecé en General Electric (GE) en la parte de iluminación, como ingeniero de aplicaciones. Luego me ocupé de la parte de proyectos, después añadí la parte de Marketing Técnico, luego licitaciones y posteriormente las ventas a grandes obras. Finalmente me transformé en Gerente de Ventas. En ese momento empezamos a hacer el marketing de las obras que hacíamos.

P: Por ahí en ese momento no eran tan usual como lo es ahora.

S: Exactamente. Como participar de congresos, hacer marketing de las obras, presentaciones en público de las obras hechas y lanzamientos de productos. Fue un trabajito donde GE se posicionó como el principal proveedor de la Argentina de lámparas de sodio de alta presión porque tenían un muy buen producto y además hicimos un muy buen equipo de marketing alrededor de eso con una especialista en publicidad muy buena, Nora Carlone, y logramos hacer un buen equipo. Conste que GE era la tercera en participación de mercado, después de Phillips en primer lugar y Osram en segundo. Todo esto hasta que se produce la compra de Osram de GE con lo que Osram comienza a pelear por ser la primera empresa en Argentina. Hoy en día sigue luchando por el primer o el segundo lugar, dependiendo la posición de a qué empresa pertenece el que hace las cuentas.

P: ¿Cuál es el futuro la iluminación LED?

S: Hoy se habla mucho más de lo que realmente significa. Lo que sucede es que cuando hay una obra muy especial, las empresas de primera y segunda línea, ponen toda la carne en el asador tratando de lucirse con LEDs. Sin embargo, la participación del LED hoy es relativamente baja en cuanto a facturación. Se habla mucho de LED pero todavía le falta volumen de facturación.

P: ¿Y por qué se habla tanto entonces?

S: Porque es novedoso. En alguna época, 15 años atrás, salieron las dicroicas. Todo el mundo quería dicroicas, hasta ponían tantas que recuerdo haber visitado un departamento que tenían 100 dicroicas en el living. ¿Pero qué sucede? Era la dicroiditis. Hoy es la manía del LED. Entonces todo el mundo habla de ellos.

P: ¿Se sabe cuando se habla de LEDs?

S: Muchas veces no. Hay muchos que están haciendo macanas y muy graves porque el LED es una fuente de luz que necesita precauciones muy especiales por como se conecta, por su fuente pero sobre todo por la ventilación. Uno piensa: un solo LED se puede tocar, no calienta nada, pero cuando se ponen 10, 20 LEDs juntos, entonces ya necesita disipación. Si se ponen LEDs de potencia, todavía más. Hay algunas luminarias europeas, por ejemplo, como las LEDVANCE de Osram, que el LED es el 10% del volumen del artefacto. Todo el resto es un disipador para sacar el calor y que no se quede dentro del LED porque le acorta la vida. Entonces, en la medida que se van trabajando nuevas soluciones y se va mejorando la capacidad del manejo de la parte térmica: el LED va a ser absolutamente el rey. De aquí a 5 ó 6 años va a ser más importante la venta en LED de lo que se están vendiendo en cualquier otro tipo de lámparas.

P: ¿Cuál es el siguiente paso en LEDs? ¿Qué les está faltando?

S: Lo que sucede es que aún es una solución cara. Porque necesita una fuente especial y porque el LED en sí todavía es caro y no se llegó a la curva de aprendizaje del costo en el que baja violentamente en función de la cantidad. Todavía están aprendiendo a hacerse los LEDs.

P: ¿Es una cuestión de que se empiecen a vender más o es una cuestión de innovación tecnológica?

S: Es innovación tecnológica porque se están inventando LEDs de alta potencia. También se están inventando LEDs que son capaces de funcionar en corriente alterna, con lo cual la fuente de alimentación se transforma en un transformador y se abarata mucho el sistema.

P: ¿Cómo ve el futuro de las luminarias en general?

S: En la empresa, nosotros hacemos las proyecciones a mediano plazo de aquí a 10 años de lo que va a pasar. Las lámparas convencionales, dentro de las cual están las incandescentes, fluorescentes compactas, fluorescentes y las lámparas de descarga ya están maduras y declinando. Han iniciado el camino hacia la desaparición. Tanto es así que en la Argentina a las incandescentes las prohibieron por Ley, pero en otros lados su desaparición se debe a que están en declive. Las que van a seguir subiendo son las lámparas fluorescentes compactas electrónicas, o sea, las de bajo consumo. Esas van a ser los astros durante los próximos cinco años. La lámpara de tubo habitual también va a empezar a morir por el tema de que van a ser reemplazadas por el LED. Hoy en día ya hay tubos fluorescentes que tienen la forma de un tubo común, la distancia de un tubo fluorescente pero tienen LED, con lo cual se logran algunas ventajas. Esto es todavía un engendro de adaptación y se necesita un arrancador especial para que opere. Todavía no es un producto maduro pero ya están también trabajando en él.

P: Eso influye también mucho en el comportamiento de las personas.

S: Una de las grandes ventajas de esa construcción es que se puede pasar de luz brillante a luz suave, de luz cálida a luz fría. Muy blanca, rosadita: lo regulas todo. Esa es la ventaja que tiene el LED. Una vez que instalaste una luminaria de LED lo puedes hacer ajustar para lo que quieras. El usuario pone la luz que quiere.

P: ¿Cómo ves el LED para exteriores?

S: Por ahora, el LED es fundamentalmente un producto de interiores. Una de las cosas que lo deteriora es el medio ambiente. La humedad, el polvo, la lluvia. Los productos químicos. Todo eso ataca al LED. Sin embargo, hay muy buenas luminarias para iluminación de exteriores para iluminar fachadas que dan unos resultados excelentes. El Cristo de Corcovado que fue iluminado por LEDs es un claro ejemplo de esto.

P: ¿Para exteriores qué es lo mejor?

S: Depende lo que quieras mostrar. Por ejemplo, Osram acaba de iluminar indirectamente la Casa de Gobierno. ¿Qué se podía usar en lugar de LEDs?. Podrías usar mercurio halogenado rosado o podrías ponerle mercurio halogenado y un filtro. Pero no dejaría de ser una iluminación estática. Se instalan las luminarias y ahí quedan. En cambio, con los LEDs, se puede cambiarle el tono, jugar con el brillo. Iluminar una parte y apagar la otra. Se pueden mezclar los tonos. Se tiene la posibilidad de la flexibilización. La ventaja que tiene el LED, utilizado en la Casa Rosada, es que es de largo plazo: si está bien instalado y diseñado, son obras que pueden durar 40, 50 años. Es más probable que cambie la tecnología y que con eso se reemplace la instalación a que esta se muera. La instalación va a seguir viviendo y por ahí se reciclan los materiales y los usan en otro lado, pero no va a dejar de funcionar.

P: ¿Creés que a mayor creatividad para iluminar, se acelera la investigación y se desarrollan nuevos productos?

S: Totalmente. Hoy en día hay productos que no existían ni por asomo hace cinco años atrás y esto es uno de los motivos por los cuales algunas compañías no pueden competir. Tienen que ser empresas ya establecidas y que tengan los recursos económicos como para poder hacer esos desarrollos. Tanto Phillips como Osram y Samsung están comprando empresas que son chiquitas pero que tienen un gran desarrollo tecnológico y que han logrado algún producto especial. Por ejemplo Osram compró Traxson, una empresa de origen alemán. Hay empresas que se dedican sólo a inventar los Drivers, que son las fuentes de alimentación. En tanto, otros que sólo hacen regulación, cómo comandar la luz, etc.

P: ¿Cuánto se puede proyectar en el rubro?

S: Hacemos las proyecciones a 10 años. Irse más allá es simplemente adivinar. En 10 años se puede hacer una proyección del estado actual y pensar cómo se van a comportar las distintas variables. En la Argentina, aunque parezca mentira, las proyecciones funcionan. Quizás sea un trabajo más de adivinación en la Argentina que en Europa pero estamos obligados a proyectar. Sin embargo, la proyección del año que viene debe ser exacta.

P: ¿Cuáles son los nuevos productos que aparecerán en LEDs?


S: Un nuevo LED que es muy distinto a lo conocido. Se llama OLED, que significa LED Orgánico. Los LEDs están hechos normalmente a base de material inorgánico. Los O-LED están trabajados con materiales orgánicos muy especiales que te permiten hacer como una tejuela o como si fuera un mantel, se puede llegar a doblar y si se lo alimenta eléctricamente da luz. Sirve para iluminaciones suaves, no para encandilar y gasta muy poca energía. Gasta tanto como un LED común. Un watt, medio watt, no calienta, se puede darle forma, enroscarlo, estirarlo y cortarlo.

P: ¿Cuánto tardan en llegar estas novedades a la Argentina?

S: Esto ya se está presentando en Europa. Se hace también en los Estados Unidos. En la Argentina todos esos inventos demoran mientras son desarrollo y quedan en Europa. Una vez que salen realmente a la venta en un año ya están acá y con la adaptación del mercado argentino rápidamente se utiliza. Las dicroicas al año siguiente de haber salido ya estaban en el país. Al principio eran carísimas y luego fueron bajando. El mercado argentino se adapta rápidamente a las novedades. Las grandes cadenas desarrollan sistemas en el país de origen del que provienen y al poner sus sucursales en la Argentina las iluminan como lo hacen en Europa. Es allí cuando lo ve el de la competencia y dice ¿Qué es lo que está usando? ¡Yo quiero eso! Y así se expande rapidamente.