Una vivienda en las pendientes cordobesas
La construcción de La Casa en La Cuesta, de 380.00 metros cuadrados, se ubica en una región cercana a la ciudad de Córdoba, en Sierras Chicas.
La construcción de La Casa en La Cuesta, de 380.00 metros cuadrados, se ubica en una región cercana a la ciudad de Córdoba, en Sierras Chicas. A cargo del arquitecto Agustín Lozada, el edificio se encuentra apoyado sobre una sierra de marcadas pendientes, generando una comunión entre las piedras de los alrededores con el destacado edificio gris que parece incrustado en la topografía.
Dadas las condiciones del terreno, se ejecutó la vivienda en tres pisos, y se procuró homogeneizarla mediante amplios espacios abiertos que invitan a pensar en la unidad entre la arquitectura y la naturaleza.
A través de un puente se comunicó a la calle exterior con la terraza, creando también así el ingreso a la construcción. En ese mismo espacio de la terraza, se optó por una decoración de espejos de agua que permiten visualizar panorámicamente el paisaje del valle. El entorno escarpado funciona como un contenedor que rodea a la casa, con lo cual fue necesario recurrir a las terrazas y balcones para evitar el encierro y obtener imágenes totales de la naturaleza alrededor. Por la misma razón de la pendiente, la construcción se proyectó principalmente en altura y no sobre el terreno.
Inspirado en un regreso a las cavernas, el interior recupera el vínculo con la tierra mediante espacios ciegos que generan las escaleras con aquellos de las aperturas, brindando la imagen de la naturaleza en los ambientes que invitan a observar el paisaje de los alrededores. De esta manera, el interior combina los efectos de los espacios cerrados con los efectos de las terrazas y balcones, destacando determinados lugares. Las aperturas permiten dar vistas en las cuales apreciar la naturaleza desde la quietud, mientras que en los lugares de circulación como las escaleras permanece oculta.
Los tres niveles de la vivienda también fueron planificados en sus distintas funciones. El nivel más elevado, donde se ubica la terraza y la entrada, es el espacio destinado a eventos sociales. Cuenta con el espacio abierto más importante, y por lo tanto tiene el mayor efecto visual de naturaleza de la construcción. En el piso intermedio se ubicó el dormitorio matrimonial, y en el inferior los dormitorios para los hijos junto con el living. Estos ambientes privados se complementan con un patio cubierto también en el último nivel.
Para hacer más efectiva la unidad de la construcción con el entorno natural, se eligieron materiales de naturaleza similar como las piedras y el hormigón. Los espejos de agua cumplen un papel fundamental para suavizar a estos elementos y generar armonía en el diseño.